La pregunta está en la calle. Con una tasa de natalidad cada vez más baja, el problema es que hoy las cosas ya no son como antes. Recapitulemos. Cuando nosotros -los hijos de los 80- éramos pequeños la ropa, los libros de texto, los juguetes y todo era heredado, compartido o ambos. Ahora los libros de texto de un año para otro no sirven, la ropa sí por suerte nada nos limita ahí, al igual que con los juguetes, si bien es cierto que en esta nuestra sociedad cada vez más consumista los niños exigen objetos cada vez más caros, con la consiguiente preocupación de los progenitores. No obstante para eso estamos nosotros, los padres de las criaturas, para enseñar que está bien y que no, y eso señores (aunque cueste) es educar.

Luego está el tema de las extraescolares, que valen un potosí que no todos los padres pueden permitirse, por no hablar de los zapatos, la ropa que parece encarecer por momentos, las vacunas “voluntarias” ( a 200 Euros) en fin…

Hoy las empresas
ven a la mujer como un límite en su crecimiento: cogen bajas maternales -dicen-,
se les ponen malos los niños y faltan, además ¡se van a su hora!. Increíble.
Algunos empresarios hasta se atreven a imponer sus condiciones cuando una mujer
solicita una reducción de jornada, se saltan la ley a la torera, o,
directamente endurecen las condiciones de trabajo hasta que no les dejan más
salida que dejar su empleo por la puerta trasera. Lo vemos todos los días mientras el gobierno
(nacional y autonómico) empapela nuestras paradas de autobús y nuestras vallas
publicitarias con consejos sobre la conciliación, mientras delante de sus
propias narices los empresarios frenan cada día la natalidad con sus políticas
y las mujeres seguimos cobrando mucho menos que los hombres…Menudo cachondeo.
Así pocas mujeres se atreven a tener un hijo, que hoy por hoy es una heroicidad en este país (“antes llamado España”), y no digamos dos o tres. Vamos que deberíamos darles una medalla, a ellas, a los abuelos y a todos los que hacen posible que haya nazca un niño, con todo lo que esto implica. Mientras no cambiemos la mentalidad, y no se impongan medidas reales como primar la igualdad de salarios y multar a los que no la cumplan, pagar por hijo menor de una edad -pero de verdad- (como se hace en otros países), fomentar la contratación en jornadas más reducidas rebajando la seguridad social, y algunas más que deberían pensar ellos ( que para eso les pagamos ) esto no mejorará. Y las mujeres seguiremos igual: dejando de trabajar o aguantando situaciones laborales denigrantes. Tercermundista.
Un beso (reivindicativo). Lola
Es muy difícil Lola, el problema es que además de todos lo que tú expones, queremos ser las mejores madres, las mejores trabajadoras, las mejores esposas, las mejores amigas, las más guapas, las más delgadas .... Y todo no se puede, siempre hay que renunciar a algo. Un besote preciosa.
ResponderEliminarHttp://blog.sinetiquetar.com
Toda la razón, Lola
ResponderEliminarYo tengo amigas a las que les está costando sudor y lágrimas, es muy frustrante así que está muy bien que lo reivindiques,
Un beso, preciosa
hoy en dia es "necesario" pero estaria bien que pusieran mas facilidades porque debe ser muy duro.
ResponderEliminarbesos.
Es verdad, vamos de pais progresista y desarrollado, y luego hay que escuchar toda una sarta de idioteces sobre el rendimiento de las mujeres en el trabajo. Y lo peor es que parece que vamos hacia atras.
ResponderEliminarUn beso a las mamas, trabajadoras y no.