Esperando al 2013

Un año más, el tiempo pasará y cada año es como una página, el que se va la escrita, las cosas que suceden como en la canción “gira el mundo…” y el nuevo es una página en blanco, algo que está por escribir, un pedacito de vida inédita.

 

 

El 2012 ha estado bien. El año pasado escribí una lista de propósitos ( que resultó ser una terapia excelente como guía a lo largo de estos pasados meses ) y lo cierto es que aunque no cumplí todo sí bastantes cosas.

 

Y el 2013 seguro que será mejor, más que nada porque al final los optimistas son los que acaban llevándose lo mejor. Todos conocemos alguno, y si tenemos suerte más de uno. Esas personas que aunque la vida no les sorprenda siempre con felicidad y suerte por doquier ellos siempre son capaces de sobrellevar todo con ánimo y entereza y poniéndose de pie, aunque la adversidad se empeñe en tumbarles alguna que otra vez.

 

Y este va por Mercedes, mi vecina. Por su sonrisa perenne y su buena cara, por su alegría contagiosa y por ser como es. Personas como ella hacen que deseemos ser mejores y es que como dice su sobrina: ella primero sembró y ahora recoge.

 

Así que al 2013 le pido que seamos mejores personas, que tengamos fuerza, que nos acompañe la suerte, que nuestra sonrisa nunca se borre, que la salud sea una constante, que el dinero no falte (al menos el necesario) y que nos amen mucho y sobre todo bien.

Un beso fuerte para todos. Lola

Detalles navideños (de mi casita)

 

 

 

Como cada año llega la navidad, y con ella mi casa se llena de detalles excesivos, “purpurinosos” y festivos para celebrar el año. Además de eso he de añadir la extraña fijación de mi madre (que se niega a decorar su casa aunque ya se la decora servidora) pero se empeña en elaborar, comprar y regalarme todo tipo de adornos, mantelerías y enseres festivo-brillantes para mi hogar… ¿contradicciones? No se yo… Próximamente una entrada madre-hija para que todos mis lectores se rían un poco más y se den cuenta porqué madre no hay más que una…

 

Bueno pues a lo que voy, de repente de un día para otro parece que la navidad ha explotado y por mi casa abundan todos los excesos menos el espumillón (con el que hoy por hoy no puedo): bolas, purpurinas, cintas, coronas, guirnaldas, estrellas, ángeles, papas noeles de todo tipo y condición, y por supuesto el belén (en mi caso de playmovil) se adueñan de la casa. Vamos, que cualquier día me tengo que ir yo porque no quepo.

Corazones de madera, de Casa

 

Me encantan estas coronas tan clásicas

 

Mini árbol con adornos metálicos

 

Estrella con bolas doradas y rojas dentro

 

Velitas dentro de vasos rojos, por la noche y encendidas quedan genial

 

Mas velas, estas con texto grabado

 

Papá Noël versión Playmovil

 

 

Así que aquí os dejo unas fotos de mi mansión (de 80 m), para que me conozcáis, y veáis un poco ¿más? De navidad. Con mis mejores deseos y mis mejores ideas, porque llegados a este punto ya siento no ser como Groucho Marx y no tener otras…

Mas besos navideños. Lola

 

Metidos en fiestas...

 

Así como quien no quiere la cosa ya estamos ahí, al ladito de noche buena a nada de la última del año y junto a los Reyes Magos, esa tradición tan propia como cañí, y que cada año se ve más denostada y engullida por el fantasma del nórdico enorme vestido de rojo...

Porque si algo caracteriza las fechas en las que nos encontramos, sin duda son las tradiciones:

La lotería: Que si los décimos del trabajo, los de los amigos, las participaciones de la parroquia, de la falla de la prima de mi amiga...El caso es que la lotería ha sido hoy y yo entre paseos con mis "Pin y Pon" me he enterado de refilón, así como quien no quiere la cosa...A ver si luego veo el telediario aunque sea on-line para saber que han hecho los afortunados. Y es que aunque todos los años se repiten idénticas imágenes, no puedo evitar emocionarme y alegrarme por todos los que año tras año celebran el premio, con la sempiterna botella de champagne, la sonrisa enorme, alguna lágrima, los abrazos...

La cena de empresa. Por desgracia este año no me toca ( a ver si hay suerte el próximo) aunque recuerdo algunas soporíferas y otras que mejor olvidar...pero lo cierto es que esa se repite cada año, y consigue aunar gente de lo más variopinta, que de otro modo sería difícil ver en el mismo local.

Las comilonas familiares. Con niños, maridos y mujeres de, nuevas novias y novios (super-divertido) y todo el ajetreo que conllevan. El reunirse con los que ves y con los que casi nunca ves, y el pasar un rato agradable con los que más quieres.

Papá Noël. O ese anciano barrigón que-se-supone baja por la chimenea (ni idea de cómo accede a mi casa) pero lo cierto es que aunque yo soy más de reyes, al final lo cierto es que este señor en cuestión de fechas gana por goleada, porque los nenes tienen dos semanas para disfrutar de sus regalos.

El día de noche buena y Navidad. Englobado dentro de la tradición comilona familiar. Lo cierto es que cada vez pierde más el sentido religioso. Aun así celebramos estar juntos. Y eso es muy bonito (al menos a mí me lo parece).

Nochevieja. Para mi, sin duda la noche nostálgica del año por excelencia. Hace años tambien era una ocasión para ponerse guapa, hoy eso me lo pierdo, ya que se ha convertido en otra fecha familiar (tener niños pequeños manda) pero no por ello deja de llenarme de sentimientos encontrados. Me llena de alegría y esperanza y por otra parte me invaden los recuerdos...

Año nuevo. Otra comilona, al menos en mi caso. Me gusta este día porque nunca he llegado a él muy perjudicada (la parte buena de no salir tanto), me resulta alegre y lleno de novedad y al contrario que el anterior para mí en este impera el optimismo. Ah y otra cosa estupenda es ver las caras de los jovenzuelos que sí que salieron la noche anterior...je je

Noche de Reyes. Con niños es definitivamente una noche única. Recuerdo muy bien como me sentía yo de pequeña y me gusta un montón ver todas esas emociones en la cara de mis peques. La cabalgata, el acostarse pronto, los nervios...y todo lo que difícilmente se puede explicar...

Y de repente...la rutina, con el cole de nuevo, la vuelta a los horarios y ¡a correr! Y hasta el año que viene. Ahora que lo pienso: mejor disfrutar de estas fechas que pasan volando.

Un beso fuerte y felices fiestas para todos. Lola

 

El árbol navideño

 

Hace poco oí a un experto opinar acerca de la decoración para estas fiestas próximas y dijo las palabras mágicas: “La clave para decorar es que todo vale”. De acuerdo totalmente: cada uno con su estilo y además probando y experimentando, porque aunque a veces nos equivoquemos y el resultado final no sea el esperado ¿no es mucho más divertido así?

 

 

 

Este año yo tenía el capricho de tener un árbol de verdad-natural-vaya- peero al final va a ser que no- ya que mi marido argumenta ( con mucha razón me temo) que lo suyo sería pasarlo luego a la terraza (inexistente en mi caso) con lo cual,  me haré con un árbol “plasticoso-chic” y que tendrá que ser de tamaño mediano-grande, porque mi hija mayor así lo reclama.

 

 

Para mí el árbol de navidad debería ser al menos mediano, y la decoración del mismo y en general para toda la casa particularmente me gusta en dorados y rojos: son los colores por excelencia de estas fechas. Resultan cálidos y a mí nunca me aburren. Últimamente ganan terreno colores poco usuales como los violetas, rosas, azules…y cualquier toque inesperado. Yo aconsejo coordinar uno o dos colores y seguir el patrón para toda la casa, me parece más elegante y armonioso, aunque esa es sólo una de mil opciones.

También los multi colores son una alternativa, desde luego alegre y que aunque cayó en olvido durante varios años ahora vuelven a estar en boga, para hacer nuestro hogar divertido y distinto. ¡Viva el toque kitsch! Y además los niños adoran lo vistoso, y al final ellos son los reyes de estas fiestas…

Los motivos también se renuevan, desde flores a pájaros, pasando por mariposas, de temática marina, galletas…y todo lo que la imaginación, la destreza, el pateo por las tiendas, la capacidad de reciclaje…den de sí.

 

Otro tema es la iluminación. Empieza a ser habitual ver los árboles iluminados por leds, por doquier se impone la novedad y la tecnología invade hasta los aspectos más clásicos de nuestra vida… y lo cierto es que con ellos se renueva y actualiza hasta la decoración más tradicional.

 

La estrella es otro punto que varía…y hasta mi hija pequeña es capaz de discernir que sin estrella es sólo un abeto y no un árbol de navidad, así que para satisfacer el gusto infantil y porque me parece que no le falta razón este año me he hecho con una bien grande y vistosa que coronará nuestro árbol.

 

Las cintas son otra opción para darle carácter: a modo de guirnaldas y rodeando el mismo completan el estilo decorativo dando ese aspecto clásico. No obstante yo en mi árbol nunca he llegado a usarlas aunque sobre todo con cintas anchas queda muy bien.
 

El tamaño de los objetos que lo adornan debería estar en consonancia con el del soporte, así los arreglos grandes siempre lucen un montón, son llamativos y atrevidos. Los pequeños me gustan más por separado, para adornar otras partes de la casa, o bien en árboles más reducidos.

 

Y para mí es esencial decorar todo el perímetro, aunque no se vea, yo sí que se si está o no adornado, así que a mí con eso me vale…

 

Los hay que prefieren el estilo sobrio y poco recargado, con pocos pero bien elegidos accesorios, hasta los que se decantan por los árboles bien cargados de bolas, adornos y decoración de toda clase, para conformar un diseño barroco.

 

De cualquiera de las maneras y para los que os animéis a poner vuestro árbol espero que mis sugerencias os sirvan, o al menos os entretengan.

Besos (navideños). Lola

 

Ya están aquí…las cenas de navidad

Como todos los años la navidad llega anticipada por el bombardeo de anuncios de perfumes y los juguetes claro…ante la desesperación de los progenitores.

 

 

Y con las fiestas llegan el turrón, los villancicos, las compras y  las omnipresentes comilonas porque llegados a estas fechas, parece que de repente hay que verse con todos los amigos, familiares, compañeros de empresa (a estas alturas eso sí es una suerte) y hacer 5.286 cenas diferentes.

 

 

Y aquí llego como todos los años a proponer soluciones, a dar ideas a ver si alguna os sirve y así os “coméis menos el coco”:

Pull and Bear

 

El vestido negro.



Blanco

 

Corto, sencillo y con accesorios de super-tendencia. Este año ya sabéis que los maxi collares se llevan la palma, pero un anillo de cocktail, o una pulsera vistosa tambien animan cualquier look. Yo había pensado incluirlos en mi carta a los reyes, peeero sucumbí antes. Así que lo más seguro es que me decante por esta opción para alguna cena-comida.

 

 

 

 

Anillo de Blanco

 

Rockero-chic de Zara

 

 

La falda y la camisa.



O jersey, incluso camiseta. Para las más fashion-atrevidas recomiendo la sudadera. Ole eso sí que es rizar el rizo.

 

 

 

 

 

Aquí las opciones son infinitas, así que comenzamos: Sobre todo, es importante que prime el contraste.

 

 

Si nos decantamos por una falda básica-de-toda-la-vida  ( o pantalón) hay que darle "vidilla" con una parte de arriba brillante, con transparencias o sofisticada.

 

 

De blanco con peplum, tendencia 100%

 

 

Las faldas brillantes ( lentejuelosas, sobre todo) son este año lo más: Lo mejor, mezclar, con una camiseta básica o un jersey ( de punto rústico puede quedar genial)  y algún mega accesorio (tocado, pendientes, collar, pulseras)

 

 

 

 

 

De pull & bear la quierooo...

 

 

 

El pantalón lujoso:

Pijamoso de Zara

 

tipo pijama o brocado, y siempre tobillero. Se acepta la vuelta en el bajo como opción, ya que no todas nos permitimos renovar vestuario cada año…Recomiendo también dejarle todo el protagonismo, accesorizarlo con estilo y con unos buenos tacones. Si prima la comodidad, chicas: unos slippers son lo último.

 

 

El vestido brilli,de encaje  o brocado:

Blanco

 

Este último es lo más de lo más. Se llevan con vuelo y marcando cintura. Algunos tienen detalles preciosos en la espalda.

 

Blanco

Blanco, me encanta el estilo años 20...

 

El terciopelo:

 

Massimo Dutti

 

Stradivarius

 

Ojo: importante el manual de uso. Lo más de lo más las chaquetas. También pantalones (mejor pegaditos y tipo pitillo) pero también faldas y vestidos toman el armario, no obstante para no parecer escapada de los 80, o de noche de fiesta ( lo sé, tengo pesadillas con esto) es aconsejable ser crítica ante el espejo. Soy más partidaria de mezclarlo (pantalón, o chaqueta). Lo dicho: espejito, espejito…

 

 

 

 

La chaqueta:

 

Stradivarius

 

Blazer, pegadita y entallada, de terciopelo, o de crepe o similar. Aun quedan tipo smoking que tanto se han llevado otras temporadas. Lo bueno es que tiene mil usos, y para una cena yo la llevaría preferentemente con un pantalón o con un vestido, y, claro con algún mega accesorio.

 

Espero que os haya servido este resumen, unas ideas para estas cenas y estos días de compromisos…para que luego no digáis que no tenéis nada que poneros.

Besos. Lola