Un salmón saltando, para entrar en materia |
Algo que he aprendido con el
tiempo es que no me gusta leer las críticas de las pelis, porque en casi todas
me destripan la obra en cuestión y, eso me sienta pero que muy mal…así que lo
malo es que a veces por eso veo algunos bodrios; pero como el que no arriesga
no gana: es lo que hay. Y es que, queridos lectores no saben lo difícil que es
hacer una crítica de una peli sin contar más que lo justito, y, a eso es a lo
que me dedico aquí. No descubro argumentos (sólo un poquitín) y mucho menos
finales, si no: para qué ir al cine…
La peli; de esas
con encanto, con personajes atrayentes, bien ambientada, con un buen guión (que
no brillante, pero sí atrayente y envolvente) y una de mis actrices favoritas
Kristin Scott Thomas, enorme y fantástica haciendo un papel divertido y
fabuloso, como sólo ella y alguna más saben hacer ( mi admirada Meryl, Julianne
Moore y seguro que me dejo algunas, pero son pocas). El actor principal también
fantástico Ewan y la protagonista está a la altura.
La historia,
como toda ficción que se precie tiene su puntito de locura, su obra magna casi
casi imposible y su nota de amor que al final es lo que mueve el mundo…
Y una
ambientación muy lograda, desde grandes a empresas estatales, pasando por casas
diferentes y definitorias de las almas que las habitan, hasta contar cuatro
diferentes, tan distintas y tan encantadoras cada una a su manera. Los paisajes
que acompañan la historia también son atrayentes y particulares. Partiendo del
verde más intenso al desierto más impresionante.
Los personajes
se merecen un diez: desde los “típicos” inglesitos rancios con su puntito de
encanto ( que también lo tienen) a la chica sobradamente preparada, vestida ideal,
o la “freaky” de su trabajo y “super entregada” a todas las causas en que se
involucra, pasando por políticos retratados de manera totalmente humorística y
caricaturizada. También está “el Yemení”, un personaje que de alguna manera
completa todos los demás. Y la fe; en las personas, en los finales felices, en
el amor, en la religión; pero no quiero llevar a equívoco; la película está
lejos de transmitir cualquier misticismo o religiosidad, lo que sí transmite es
buen rollo, y positividad, y buen hacer y credibilidad por parte de los
actores.
También tiene toques de humor memorables, pero yo no diría que es una
comedia; simplemente es una historia, y en como en la vida hay un poquito de
todo; de sal y de azúcar. Y de salmón que a mí, me encanta.
Un beso. Lola